
MORELLA: Después de trastear durante unos días por Morella, toca y debo retomar las viejas manías de antes, volver a verme bien, y ya lejos de andar más o menos rápido, sentirme bien conmigo mismo.
Queda mucho trecho de temporada aún, y mientras las ganas sigan intactas no habrá problema.
El contrapunto de todo esto no es otro que un exceso de trajín extradeportivo, o lo que sería lo mismo, una bacanal de fiesta desmesurada.
Esto no es malo, o sí, aunque mucho bien no hace.
El domingo pasado, después de estar casi cinco días sin entrenar y haciendo una vida de perroflauta, salí a rodar, costándome casi la salud poder hacer 50 kilómetros. Con este panorama el lunes preferí seguir entrenando, y haciendo tensadas cortas para, al menos, volver a espabilar el cuerpo.
El martes ya me decidí a probarme en "La Volta al Montsià" carrera de Grans Clàssiques disputada en Ulldecona. Iba con dudas de como podría rendir, aunque el día anterior ya noté una gran mejoría, una carrera es muy diferente.
La carrera, a priorí, se me adaptaba, llaneo y repecho corto.
El rendimiento me pareció sorprendente en dos aspectos; uno: no bajé de 180ppm ni en las bajadas; y dos: a esas pulsaciones tampoco iba tan incómodo.
En la subida de 2 kilómetros que había en cada vuelta no iba mal, y sin hacer florituras coronaba cerrando el grupo, hasta que encarando la última subida los calambres se cebaron de forma inusual en mi, pasando uno de los peores ratos que recuerdo encima de una bici...
Aun estoy agarrotado ahora, y llevo dos sesiones de masaje... Normal no es, o sí, dados los días precedentes.
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Ahora vuelta a la normalidad total, volviendo con las obsesiones por el peso, gráficas de SRM... y todo eso que hace de este deporte una bonita pasión.
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Gráfica PMC, se aprecia el parón, no? :) |